relatos, apuntes literarios...

jueves, 1 de diciembre de 2011

los huesos nuestros

Aquel muchacho de cincuenta años
desconocía la escritura límpida (u olímpica) de los ganadores:
no había hecho los deberes.

Su casta pertenecía a lo epidérmico,
pero su novela era hueso duro de roer.
Su panfleto era hueso de la fosa,
rodeado de ancianos vacilantes, sobrecogidos ellos,
moviéndose como bebés a cámara lenta,
sujetos a ese torvo principio de incertidumbre, con esa conmovedora eficacia.

Aquel muchacho negro y cincuentón perdía hueso por la mañana
y lo recuperaba por la noche;
sacaba la bandera roja de debajo de la alfombra
y, entonces, sus manos escarbaban el parqué
y los muertos de siempre rugían desde el fondo de sus corazones.

Sacaba el hueso, y la cartera vacía, y una llave de la casa derribada.
Luego, escribía un blues
que no podía ser perfecto,
que no podía ser una escritura limpia,
sino que ya mordía el polvo y ya se recocía en pucheros de sangre.

Aquel esclavo de cuántas primaveras era uno de los nuestros,
Nada atildado, con su sensibilidad tercermundista,
con su destreza para sentirse fuera de lugar y su lenguaje rijoso.
Un desgraciado que no sabía estar ni entre su propia cochambre.

Porque su forma era la del hueso perruno y su sabor el del hueso de la olla,
Porque su verso describía fábricas y misteriosos jardines
y las protagonistas de sus cuentos salían de trabajar a las ocho de la tarde.

Nosotros somos así. Venimos de un espejismo.

Disparen a la fosa, allí, en la oscuridad, estamos a salvo,
rodeados de ancianos temblorosos,
y de los huesos nuestros.






2 comentarios:

  1. Acabo de escribir un pequeño cuento (casi un microrrelato, que ya mi hijo se ha ocupado de tildar de "un poco cursi"), que trata precisamente sobre huesos, y me he dicho: "Voy a mirar la página de Esteban, que hace mucho que no la echo un vistazo"...
    Sincronicidad, que diría Jung
    Y al grano: precioso el poema

    Marco

    ResponderEliminar
  2. Veo que cuentas con un crítico implacable, je.

    Este poema no es nuevo, pero me pareció oportuno publicarlo ahora, para "refrescar la memoria".

    Bueno, ya me pasarás el relato, y ya veremos si mi dictamen coincide o no con el de Pablete ;)

    Gracias por la visita. Nos vemos.

    Salud.

    ResponderEliminar