relatos, apuntes literarios...

lunes, 16 de mayo de 2022

condenada ciudad

 

Cigüeñas sobrevolando los cañaverales. Helicópteros
sobre las chapas caldeadas del zinc; hay una ciudad en marcha
derribando fronteras a golpe de recelo
y actitud.
 
El flow procede de una muchacha
extranjera (Jenevieve tal vez) que otea el horizonte —es una vertical
introvertida, un gris que oprime, un velador
de colores tropicales—, canta
como una especialista.
 
En los prolegómenos,
encontramos una tribu de prestidigitadores alardeando; la arena
entra en los zapatos, es el incordio natural.
 
Destiny® todo lo observa; ha observado
el agujero negro central de la galaxia: 4 millones de masas
solares haciendo sus diabluras, un centinela
neutral (parece que los Ángeles
extreman cierta monotonía).
 
No es Poesía. Esta inteligencia no tiene nada que ver, pero enciende pitillos
en la oscuridad, es un zippo destinado al olvido, esta
escritura ingenua que se nos va de las manos (fluye).
Que no se puede creer.



sábado, 14 de mayo de 2022

corazonada

 

A las ocho en punto (a.m.) dos guitarras eléctricas
rasgan el continuo espacio-tiempo
o simplemente deslizan su intemperie por un tobogán
de luz tranquila: es el despertador.
 
Su ritmo puede ser equilibrista o desarticulado.
 
Veamos: los reyes desayunan matemáticas
todas las mañanas, cuentan con los dedos
porque es su prerrogativa.
 
Esta mañana hemos
desayunado pan con economía, económico como una barra
de pan duro mojada en la leche del desierto. Estaba
duro como una barra de hierro, sabía
un poco a poesía, como a un silencio
encañonado.
 
Alguien debería
trabajar en la construcción
de arquetipos benéficos, seres sin mácula
dentro de organigramas y frecuencias, alguien debería leernos
la cartilla todas las mañanas, sí, un ente descorazonador.



jueves, 12 de mayo de 2022

el alma del pasado

I died for Beauty ― but was scarce / Adjusted in the Tomb,
When One who died for Truth was lain / In an adjoining Room ―
(Emily Dickinson)
 

El pasado es la huella del futuro,
saberse ahora es recordarse luego
como perder es conocer el juego
y ver la luz, desfigurar lo oscuro.
 
El porvenir es un presente puro
como el incendio que descubre el fuego,
es el milagro que cancela el ruego,
el paso franco que desnuda el muro.
 
Y la ilusión que perderás mañana
es la que hoy tu corazón se gana
con la desolación de su pureza.
 
La verdad es el arma del pasado
y el futuro, un profeta desarmado
que se juega a los dados la belleza.



lunes, 9 de mayo de 2022

maneras de escribir un poema genial

 

Impertinente muerte, muriendo a voz en grito a todas horas; incluso
Emily —muerta—, ella que tantas
veces se habrá reencarnado.
 
Si en cada generación, en cada país, ha visto la luz
del día un pequeño genio alveolar, un aliño
curioso, un disidente. Suave
forma del tiempo (desdibujándose).
 
Materia y vanidad, litros de libros
electrificados; Destiny@ tuvo que repartir entre la multitud
sus propios ejemplares de la 'Guía de Supervivencia' (Zombi), de Max Brooks.
Oh, tuvo que desprenderse de sus contadas
existencias de 'Hiroshima', de Hersey, aquella edición exigua
de 'Represalia', de Ledig: su biblioteca
de los horrores.
 
Sin embargo, Emily seguía tendida
sobre la hierba (¡si hubiera podido escuchar a Aurora!), los cañones
atronaban su distancia, inocentes caníbales.
 
En el cielo se dibuja la muerte, tiene
cara de niña, cara de estar enamorada, su belleza
representa la disciplina del éxodo, esta obstinada manía de vivir.



viernes, 6 de mayo de 2022

el crack

 

El cop retuerce el brazo de la anciana, podría
llamarse Ghod, como un dios
salvaje, un dios de terciopelo
—como dios manda—. Un resto
de peluche de la juguetería abandonada.
 
Tanto creer
para esto, tanta oración
subordinada para esto; tantos libros y tantas mujeres
absortas en la lectura, tanto ensañamiento hermenéutico.
 
La biblia está compuesta de muchas
partes tenebrosas, pero termina en un punto
de luz (es un enganche ilegal).
 
En el examen que te dará una placa y una pistola de verdad
entran las historias bíblicas
más trilladas: Abraham y Jacob, David y su complejo de superioridad.
 
Tantas páginas impares y todo era cierto,
las pataletas, los tesoros, las videoconferencias; ah, el mundo
ha venido para quedarse,
y ha preguntado por ti.