relatos, apuntes literarios...

lunes, 2 de septiembre de 2019

doom patrol


Tocar una guitarra, ese compás
tiene algo de filosofía, ¿qué fundado experimento alcanza
la combustión de un acorde, su pausa tan hermética y trivial? La eternidad
graba un musical eternamente; cantar es entonces como intentar acercarse al misterio
real de la armonía, meticuloso adorno.

Puesto que la filosofía es importante –si alguien sabe lo que vale una vida. Los poetas
entienden de personas y de migraciones, comprenden bien la mecánica del vuelo, el concepto
de huida y extinción. Su rueda es como un día ful, una raya estirada
como un chicle de plátano, la existencia condenada. Esta doom patrol de la lírica y el caos, este meollo
intransigente de las aspiraciones y las transpiraciones, los sueños
constructivos y el paisaje que desacontece.

Toda música procede de otro lugar, inspira como una banda de ángeles
tañendo liras, arpas y trompetas. Ah, criaturas intelectuales más allá de la ética.

Nuestro corazón casi angélico (hay que decírselo a Destiny®). Concuerda con un manifiesto
esférico, un balón de oxígeno, una pompa de jabón. Somos, en nuestro interior, fieles e ignorantes,
sumos sacerdotes del vértigo. Nos confunde la música, que se nos atraganta. Llevamos el ritmo
como si de un estigma se tratase.

La tarea será decantar una forma, decantarse por un formato u otro de la introducción:
o palabra o abismo. Habrá que pisar la tierra, que sentir la tierra entre los dedos, bajo los ojos y en el paladar,
será la tierra la que nos ampare. El campo abierto es nuestra
madriguera, aquí se escucha el largo renacer de la conciencia, la deforestación
del pensamiento, tanto derribo y tanta claridad.

Cítara dulce dominara el contraste; la variedad de una civilización, la frontera del éxito. Ya suena
marginal, sugiere un destino acordonado por la justicia divina, rejas para mañana, polvo y ceniza. La música
es el verdadero objetivo; hay que perder de vista la realidad, deslocalizarse
como una empresa fallida y ensayar un discurso pegadizo
a la manera del tiempo.



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