Keats ha vuelto a morir -no en solitario- en una calle mínima de Roma.
El familiar repique de campanas -apenas claudicante- bajaba de las torres,
con extraordinaria lentitud, empañando la urna meticulosamente pálida.
Las muchachas romanas cepillaban sin tregua sus acharolados cabellos,
mientras perseguían sombras en carruajes oscuros,
y los poetas dedicaban compasivas miradas a la rosa perfecta.
La muerte desplazaba su arte melancólico por los adoquines de monstruosa piedra
y en cualquier parte el eco de una canción se desplomaba herido de silencio.
¡Qué pulmones reducidos a diminutas alas!,
¡qué intolerable agonía de purpúreas noches y versos incendiarios!
Arropado por voces extranjeras, cerca del mar adusto que separa países.
Cuando falta ingenio para el grato recuerdo
y el espíritu se transforma en energía revelando su verdadera esencia,
cuando los rostros son acuarelas de espanto
y la respiración un anhelo constante que se aferra a la vida.
¡Oh Fanny, tú, mil veces muerta!
Como serena yace tu silueta, mil veces extendida sobre el agua.
Lejana y tan lejana de la habitación última, el sepulcro infectado de seres invisibles,
al otro lado del espejo, donde el aire no duele en la garganta
y el céfiro traslada el solemne latido del paisaje.
En una casa pobre hundida a martillazos en la calle,
en un cuarto menguante de algún segundo piso con vistas al exilio,
rodeado de ángeles hambrientos,
hoy ha vuelto a morir un poeta sin nombre.
Qué hermoso,Esteban! Me he emocionado con el final(uff, doble ufff)
ResponderEliminar"En una casa pobre hundida a martillazos en la calle,
en un cuarto menguante de algún segundo piso con vistas al exilio,
rodeado de ángeles hambrientos,
hoy ha vuelto a morir un poeta sin nombre. "
Escuchas los aplausos en Burgos? Un abrazo enorme, amigo querido.
Gracias, Hallie. Es como una versión extendida del soneto que publiqué en el foro. Celebro que te haya gustado.
ResponderEliminarEncuentro la poesía de Keats enormemente misteriosa, muy elegante. Era un genio.
Un fuerte abrazo.
Esteban
Escribir sobre quienes admiramos, elegir el momento en que se consuma una tragedia, dadas la juventud y la expectativas que su talento alentaba, pueden ser vistos como una osadía y sufrir la peor de las reprobaciones, ya que rara vez se manifiesta, porque se guarda muy adentro en no muy pocos casos. Tu poema deja muy pocos argumentos a éstos últimos, crea una atmósfera adecuada, está muy bien escrito y sería suficiente por el interés que suscita para colocar al poeta inglés en la órbita de algunos que escriben poesía y no lo conocen.
ResponderEliminarUn abrazo.